El anunció fue realizado ayer en Bariloche por el funcionario nacional en una reunión con Intendentes del Frente De Todos. Cabe destacar que varios Legisladores de la Linea Sur entre ellos Soraya Yauhar, Helena Herrero y Darío Ibañez y los importantes descargos y solicitudes del Senador Alberto Weretilneck tuvieron sus frutos en esta reunión.
El puente original fue construido en el 2008, entre los kilómetros 113 y 116 de la ruta nacional 23 en el marco de la obra de pavimentación de la principal vía de comunicación que tiene la Región Sur entre la cordillera y el mar. Pero, durante la madrugada del 8 de marzo de 2012, una descomunal crecida del arroyo convirtió en ruinas la estructura de 65 metros de hierro y cemento.
Se estima que aquella noche de hace 10 años pasó un caudal de 1.980 metros cúbicos de agua por segundo, que superó el nivel de las vigas, con el agravante de que, unos 300 metros antes, el cauce del arroyo se estrecha al pasar por el puente ferroviario, incrementando su velocidad.
A partir de allí se sucedieron una serie de accidentes, muchos de ellos con víctimas fatales, y numerosos pedidos de reconstrucción principalmente por Legisladores Provinciales y hasta el mismo Senador Alberto Weretilneck. En este contexto, la obra fue licitada en tres oportunidades, pero nunca se ejecutó.
En la reunión de Bariloche, en la que estuvieron además el sub administrador Alejandro Urdampilleta, el Gerente Ejecutivo de Regiones y Distritos Provinciales, Patricio García y el jefe del Distrito 20, Gustavo Casas, entre otros, Arrieta instruyó a su equipo a que se avance en la solución a esta problemática.
El funcionario nacional le confirmó a los jefes comunales que ya está listo el proyecto y presupuestados los recursos para iniciar los trabajos en procura de concretar la requerida reinstalación de esa estructura clave para los vecinos de la región, para el turismo y para el fluido tránsito comercial entre el mar y la cordillera a través de la ruta nacional 23.
El proyecto fue terminado hace algunos meses y luego de la evaluación en la Administración Central, el titular de Vialidad Nacional.
El nuevo diseño implicó realizar un estudio más exhaustivo debido al tipo de suelo en esa zona y se proyectó una estructura con bases más profundas y en dos tramos, uno de 80 metros de longitud y otro de 40.
La intención es evitar que vuelva a ocurrir lo que sucedió hace diez años, cuando una corriente de agua equivalente al doble del río Negro pasó por debajo de la estructura que cedió ante la potencia del cauce. Las lluvias intensas en la parte alta de la meseta de Somuncura provocan que se comiencen a llenar los cañadones, se unan los arroyos y repentinamente, lo que suele ser apenas un hondonada seca, se transforma en una riada incontrolable, que arrastra barro, árboles y todo lo que se interpone a su paso.
Arrieta garantizó la continuidad total de la obra de la Ruta 23 que hoy se encuentra en plena ejecución en los tres tramos faltantes.