Según informó el Ministerio de Salud de la Nación, quienes ingresen al país deberán realizarse una prueba de COVID-19 entre el tercer y quinto día de su llegada. Mientras tanto, no podrán concurrir a eventos masivos ni a reuniones sociales en espacios cerrados.
La cartera que encabeza Carla Vizzotti informó que “los requisitos fueron implementados debido al escenario dinámico de la situación epidemiológica y al incremento de casos positivos de coronavirus a partir de la proliferación de Ómicron, una variante con riesgo aumentado de transmisión y reinfección comparado con las que circularon previamente”.
Aseguraron que “se debe reforzar la vigilancia epidemiológica para detectar de manera temprana y oportuna un cambio en la situación epidemiológica”.
Asimismo, explicaron que estos nuevos requisitos se suman a los ya vigentes (que se presentan a los operadores de medios de transporte internacionales antes del viaje). Estos son:
-Declaración jurada exigida por la Dirección Nacional de Migraciones.
-Prueba PCR negativa realizada en el país de origen dentro de las 72 horas previas al inicio del viaje o un certificado de alta médica emitido dentro de los 90 días previos que justifique un PCR positivo que acredite que tuvo la enfermedad en ese lapso correspondiéndole dicha alta médica.
-Esquema de vacunación completo por lo menos 14 días antes de su ingreso (o de su exención si por algún motivo la tuviere) de acuerdo a lo definido por las autoridades sanitarias del país de vacunación.
-Los extranjeros deberán tener un seguro de salud COVID-19, con cobertura de servicios de internación, aislamiento y/o traslados sanitarios.
Los argentinos que no cuenten con su esquema de vacunación completo, deberán aislarse al llegar a la Argentina y realizarse un test de PCR al séptimo día. Por su parte, los extranjeros que cumplan con todos los requisitos antes mencionados podrán evitar el aislamiento al arribar al país.